Las personas compran afeitadoras para rasurar las distintas partes de su cuerpo bien sea, porque son de fácil acceso de acuerdo al presupuesto de cada quien o porque permiten un rasurado rápido y con un buen acabado en la piel, adicionalmente se consiguen en cualquier parte como farmacias, supermercados, perfumerías, bodegas o en un mall, eso quiere decir que son de fácil acceso, pero ¿Cómo se pueden utilizar para evitar erupciones e irritaciones en la piel?, a continuación compartimos cinco consejos fáciles de aplicar para utilizar las afeitadoras.

• Hidratar la piel: Antes de usar la afeitadora es importante que además de tener el rostro limpio, se debe humedecer con agua tibia, utilizando un buen exfoliante natural o colocando una toalla humedecida con agua tibia por cinco minutos, esto permitirá aflojar el vello facial para realizar un mejor rasurado, este tipo de procedimientos evita los posibles rasguños e irritación en el rostro y así tener mejor luminosidad en el mismo.
• Productos adecuados: Es importante tener un gel de afeitar para cubrir la zona a rasurar. Existen en el mercado marcas diseñadas para caballeros y damas que se caracterizan por el olor y por las sustancias con las que están creadas, muchas veces se utiliza la espuma del jabón pero esto no permite que la afeitadora realice su recorrido en el rostro de manera uniforme, debido a que la sustancia que contiene el jabón es muy seca para las hojillas de la afeitadora.
• Movimiento correcto al afeitarse: El movimiento ideal para realizar el rasurado es del lado contrario al crecimiento del vello facial, es decir, en reglas generales los vellos crecen hacia abajo, por ende el movimiento debe realizarse de abajo hacia arriba, para evitar que quede mal cortado el pelo y como consecuencia de este mal proceso al producirse el crecimiento del mismo, el vello procede a enquistarse en la piel ocasionando infección del folículo piloso y generando granos sumamente dolorosos y que dan un mal aspecto en el rostro.
• Lavado de la afeitadora: La cuchilla de la afeitadora debe estar libre de producto al comenzar a rasurar cualquier parte del rostro, es decir, se debe enjuagar la afeitadora constantemente para evitar acumular residuos en la misma que le impida tener un buen acabado en el rostro, lo ideal en este caso es tener siempre un envase para proceder a limpiar la afeitadora, inclusive un poco de agua de la llave del lavamanos funciona para este proceso que es sencillo pero útil para lograr un óptimo rasurado.
• Loción para después del afeitado: Después de rasurar la piel muchas veces queda reseca o tensa, por ello es importante aplicar una buena loción para devolver la hidratación, suavidad y luminosidad al área donde se empleó la afeitadora, esto permitirá la restitución rápida de la piel, el crecimiento suave del vello y evitar las erupciones e irritación ocasionadas por el roce de la afeitadora, otorgando beneficios después del rasurado para la pronta nutrición de la piel. Tenga siempre presente seleccionar productos de calidad.